El potente tifón Hagibis, esperado este fin de semana en Tokio y su periferia, ya tuvo sus primeros efectos, con la anulación de los partidos Inglaterra-Francia y Nueva Zelanda-Italia del Mundial de rugby, que debían disputarse el sábado en Yokohama y Toyota.
“Hemos decidido anular algunos partidos basándonos en las últimas previsiones meteorológicas que hemos conocido este jueves por la mañana”, anunció este jueves Alan Gilpin, el director del Mundial.
“Lo lamentamos mucho, pero hemos tomado la buena decisión, ya que la seguridad es nuestra prioridad número uno”, declaró Gilpin.
En cambio, el partido Irlanda-Samoa, previsto también el sábado en Fukuoka, se mantiene, igual que el partido Australia-Georgia, el viernes en Shizuoka.
El director del torneo añadió que los partidos del domingo, entre ellos el decisivo encuentro del Grupo A que deben jugar en Yokohama las selecciones de Japón y Escocia, se mantienen por el momento, aunque su caso podría ser revisado.
En caso de anulación, el reglamento prevé que el partido termine en empate (0-0). Cada equipo recibirá de este modo dos puntos en la clasificación.
Tanto Inglaterra como Francia están ya clasificados para cuartos de final del Mundial.
Pero la anulación del partido y la repartición de puntos (0-0), conlleva que Inglaterra termine en cabeza del Grupo C, delante de Francia, en una llave en la que quedó eliminada Argentina.
El resultado entre Nueva Zelanda e Italia clasifica a los All Blacks para los cuartos de final. Los dobles campeones del mundo terminan de esta forma en cabeza del Grupo B, delante de Sudáfrica.
Escocia es tercero del Grupo A detrás de Japón e Irlanda, y una eventual victoria ante el equipo local lo clasificaba a cuartos de final, por lo que sería el equipo más damnificado.
“Continuamos revisando los partidos del domingo y haciendo el máximo esfuerzo para asegurar que se jueguen”, dijo Gilpin en relación a esos encuentros mantenidos.
Hagibis está catalogado como “violento”, la calificación más alta utilizada por la Agencia Japonesa de Meteorología (JMA), y puede alcanzar ráfagas de viento de hasta 270 kilómetros por hora.
Se trata de la primera anulación de partidos de un Mundial de rugby desde la primera edición, en 1987.
A diez meses de los Juegos Olímpicos de Tokio (24 de julio – 9 de agosto de 2020), esta anulación relanzará los interrogantes sobre la capacidad de Japón para acoger grandes competiciones internacionales, debido a las condiciones naturales (temblores de tierra) y climáticas (tifones y fuerte calor húmedo en época veraniega).
Asimismo, los organizadores del Gran Premio indicaron que “se están haciendo todos los esfuerzos para minimizar las perturbaciones del programa de la Fórmula 1”.