La mascota de la familia, un bull terrier de ocho años, casi le arranca la cara a su hijo pequeño. El inesperado ataque ocurrió mientras los niños jugaban.
La mascota familiar, le destrozó la cara a su pequeño hijo. En ese sentido, la mamá del bebé compartió las imágenes del ataque, con el objetivo de concientizar sobre el tema. El hecho ocurrió el 27 de diciembre de 2021.
Por su parte, Jodie Griffiths quiso advertir a otros padres para que siempre estén “en guardia” con sus mascotas; especialmente con animales fuertes y violentos, después de que el perro de la familia casi le arrancara la cara a su hijo menor. Para que no queden dudas de los que son esos ataques, eligió publicar las fotos de su hijo con el rostro desfigurado y también del estado actual.
Asimismo, Griffiths de 35 años, remarcó que incluso las mascotas “de confianza” pueden mutilar a los niños después de que su hijo de dos años, Romy, fuera atacado salvajemente. Al momento del ataque, el nene estaba en el sofá de su casa, mientras jugaba con sus hermanos. Los niños habían estado jugando en el living con unos helicópteros voladores mientras Blizzard, el perro de la familia de ocho años, dormía en el sofá cercano. Al ver los juguetes volando el perro se enloqueció.
En ese momento, Jodie estaba en el trabajo, cuando recibió la llamada de su pareja de que dijo entre gritos desgarradores que el pequeño, había sido mordido gravemente por la mascota.
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El padre de Romy, Daniel Griffiths, de 32 años, solo miró hacia otro lado por un segundo antes de que el pequeño gritara desesperado de dolor, al correr a ver lo que ocurría, vio a su hijito cubierto de sangre después de que un solo mordisco le atravesara la nariz.
Al respecto, las angustiantes fotos que ahora publica la madre muestran cómo el pequeño Romy quedó con laceraciones profundas en la nariz y la cara, la mandíbula fracturada e incluso dientes perdidos por el ataque.
El perro era el “mejor amigo” del bebé
Los padres de Romy contaron que el perro, que era el “mejor amigo” de su hijo, nunca había sido agresivo antes. Por tal motivo, están seguros de que el juguete volador lo despertó sobresaltado y se abalanzó sobre la cara del pequeño en estado de shock.
Sobre ese día Jodie recordó:”Estaba en el trabajo y recibí una llamada de mi pareja diciendo que el perro había mordido al bebé. Estaba muy asustada y no podía creerlo. Todavía me cuesta entenderlo. Cuando llegué a casa, Romy estaba cubierto de sangre y mi compañero también”.
“Estaba gritando y luego comenzó a quedarse dormido; los médicos dijeron que era por el shock. Luego le dieron morfina hasta que fue al quirófano. No nos dimos cuenta de lo malo que era hasta después de su cirugía porque nadie nos dejaba verlo”, afirmó angustiada.
Además agregó: “Le fracturó la mandíbula, le arrancó toda la nariz, le arrancó tres dientes de raíz, le tuvieron que dar cientos y cientos de puntos… Perdieron la cuenta de cuántos”, dijo Jodie sobre lo que le dijeron los médicos del New Croft Hospital de Wolverhampton, donde fue atendido de urgencia.
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Desde allí, Romy fue trasladado al Hospital Infantil de Birmingham, donde se sometió a una cirugía para coserle la nariz y reconstruirle la cara. Lo que sería una operación de dos horas terminó tomando cinco por el enorme daño en la cara del bebé.
El amado perro Blizzard había sido parte de la familia durante la mayor parte de sus ocho años de vida desde que era un cachorro y nunca antes había mostrado signos de agresión.
Jodie dijo que los agentes de policía que llegaron primero a su casa tras la agresión acordaron que lo que sucedió había sido un “accidente”, y en principio decidieron quedarse con el animal pero tomando recaudos de todo tipo.
Sien embargo, luego Jodie -madre de ocho hijos- cambió de opinión y sostuvo que nunca más podría confiar en el animal adentro de su casa, por lo que fue entregado a una institución para que lo reubiquen.
Jodie dijo: “Blizzard siempre ha sido un perro de familia al que le encantaba jugar, amaba el alboroto y quería involucrarse en todo. Era un buen perro, suave y los niños lo querían hasta la muerte. Era el mejor amigo de Romy, incluso”.
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Fuente: “Era un buen perro”, la mascota le destrozó la cara de un mordisco a su bebé. Por Mía FM.